El Gobierno ha aprobado una nueva subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) para 2025, elevándolo en 50 euros hasta alcanzar los 1.184 euros mensuales en 14 pagas. Esta medida, acordada entre el Ministerio de Trabajo y los sindicatos UGT y CCOO, tendrá implicaciones directas para las empresas y trabajadores.
A continuación, resolvemos algunas de las principales dudas que pueden surgir con este incremento.
¿Cómo afectará este aumento a los costes laborales?
Las empresas deberán ajustar los salarios de aquellos empleados que actualmente perciben el salario mínimo, lo que incrementará el coste laboral en 50 euros mensuales. Además, este aumento podría repercutir en conceptos adicionales como pagas extras, complementos salariales y cotizaciones a la Seguridad Social. Este ajuste se aplicará con carácter retroactivo desde el 1 de enero de 2025.
¿Qué sectores serán los más afectados?
Todos aquellos sectores con una alta proporción de trabajadores remunerados con el SMI se verán afectados por esta subida. La hostelería, el comercio o los servicios de limpieza son algunos de los más impactados. Estas industrias podrían experimentar un aumento significativo en sus costes debido al incremento salarial, aunque también se verán afectados todos los sectores minoritarios que carecen de convenio colectivo aplicado.
¿Cómo afecta la subida a los contratos a tiempo parcial?
Los trabajadores a tiempo parcial verán aumentados sus sueldos de forma proporcional. Por ejemplo, un empleado con una jornada del 50% verá un incremento de 25 euros mensuales en su salario base, pasando a recibir 592 euros mensuales en 14 pagas. Además, este tipo de contratos podrían verse aún más afectados por la reducción de la jornada laboral máxima, que actualmente se encuentra en estudio.
¿Qué opciones tiene una empresa si no puede asumir el incremento?
El cumplimiento del SMI es obligatorio, por lo que las empresas que enfrenten dificultades pueden considerar:
• Optimizar procesos para reducir costes operativos.
• Reestructurar recursos humanos para mejorar la eficiencia.
• Buscar ayudas y bonificaciones que compensen el impacto del aumento salarial.
El incumplimiento del SMI puede acarrear sanciones económicas y administrativas para las empresas, además de reclamaciones por parte de los trabajadores.
El aumento del SMI en 2025 supone un reto para muchas empresas, que deberán planificar sus ajustes salariales con tiempo. Evaluar el impacto financiero y adoptar estrategias adecuadas será clave para garantizar el cumplimiento normativo y la viabilidad del negocio.
Si necesitas asesoramiento para adaptar tu empresa a este cambio, contáctanos y te ayudaremos a encontrar la mejor solución.