Los contratos bonificados en España representan una gran oportunidad para las empresas que buscan reducir costes laborales mientras fomentan la contratación de colectivos vulnerables. Este tipo de acuerdos laborales permite a las empresas acceder a importantes incentivos económicos proporcionados por el Estado, contribuyendo al crecimiento del empleo de calidad y la inclusión social.
En este blog, te explicamos en detalle qué son los contratos bonificados, los tipos más relevantes y cómo puedes acceder a estos beneficios para optimizar la gestión de tu negocio.
¿Qué son los contratos bonificados?
Los contratos bonificados son acuerdos laborales en los que las empresas reciben incentivos económicos al contratar a determinados colectivos de trabajadores, como jóvenes, personas con discapacidad o desempleados de larga duración. Estos incentivos pueden incluir:
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- Reducciones en las cotizaciones a la Seguridad Social.
- Exenciones fiscales.
- Subvenciones directas.
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El objetivo es fomentar la inserción laboral de estos grupos, ofreciendo a las empresas un ahorro económico y contribuyendo al crecimiento de empleo estable y de calidad.
Principales tipos de contratos bonificados.
A continuación, te detallamos los contratos bonificados más comunes en España, que pueden ser beneficiosos para tu empresa:
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- CONTRATO DE FORMACIÓN EN ALTERNANCIA.
Dirigido a: jóvenes de entre 16 y 30 años sin experiencia laboral o formación.
Beneficio: bonificación de 91 € al mes durante la vigencia del contrato y 28 € adicionales en las cuotas del trabajador. -
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- CONTRATO EN PRÁCTICAS.
Dirigido a: personas con título universitario, de formación profesional o certificado de profesionalidad.
Beneficio: bonificación de 138 € mensuales durante tres años por la conversión a contrato indefinido. -
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- CONTRATO DE EMPRESAS DE INSERSIÓN.
Dirigido a: personas en situación de exclusión social que participen en programas de empleo.
Beneficio: reducción en las cotizaciones a la Seguridad Social por un periodo determinado. -
Ventajas de los contratos bonificados.
Las empresas que aprovechan los contratos bonificados pueden obtener múltiples beneficios, entre ellos:
– Reducción de Costes. Las bonificaciones en las cotizaciones a la Seguridad Social pueden suponer un importante ahorro para las empresas.
– Responsabilidad Social. Contribuyen a la inserción laboral de colectivos vulnerables, mejorando la cohesión social.
– Acceso a Talento. Facilitan la contratación de jóvenes mediante contratos de formación y prácticas, permitiendo a las empresas formar a futuros empleados.
Si tienes una empresa y estás buscando optimizar tus costes laborales mientras contribuyes a una mayor inclusión social, este tipo de contratos son una excelente opción. En Avanza Asesoramiento, estamos aquí para ayudarte y garantizar que aproveches al máximo estas oportunidades. ¡Contáctanos ahora para recibir asesoramiento personalizado!